Ante los altos índices de consumo de alcohol por parte de menores de edad en la ciudad, el Gobierno del Distrito Federal (GDF) reforzará sistemáticamente los operativos para frenar la comercialización de las bebidas embriagantes a los niños y adolescentes.
Así lo afirmó el titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) Miguel Ángel Mancera Espinosa, tras firmar el denominado “Pacto Nacional por la Cero Tolerancia en la Venta y Facilitación de Alcohol a Menores de Edad”, promovido por la organización “Convivencia sin Violencia”.
En el marco de la firma de este acuerdo, el Comisionado Nacional contra las Adicciones, Carlos Tena Tamayo, informó que en el Distrito Federal, el 16.4 por ciento de los adolescentes consumen bebidas embriagantes, lo que la coloca como la entidad con mayor índice de alcoholismo entre menores.
En este contexto, Mancera subrayó que se dará un mayor impulso a operativos como el denominado “Mala Copa”, cuyo objetivo es la identificación de bares, discotecas y establecimientos mercantiles donde se comercialice alcohol a menores y bebidas adulteradas.
“Los resultados, sobre todo clausuras y detenciones por este operativo Mala Copa están ahí, tenemos personas procesadas por corrupción de menores, los sitios asegurados, y vamos a seguir en esta línea”, indicó.
Añadió que otro de los principales objetivos de este esfuerzo interinstitucional, serán los sitios clandestinos conocidos como “chelas”, donde se vende alcohol a menores de edad en inmediaciones de escuelas.
“Vamos a estar en labores de investigación en las escuelas, ya que se han popularizado estos sitios, y no se va a permitir que se venda alcohol a menores; también estaremos realizando operativos contra fiestas clandestinas”, indicó.
El titular de la PGJDF recordó la importancia de la “denuncia ciudadana” para que la autoridades puedan conocer de los puntos donde se vende alcohol a menores, e intervenir en consecuencia.
“Cuando hablamos de este tipo de corrupción a menores en sus distintas modalidades las sanciones son de cárcel para el responsable, y en lo administrativo es desde el aseguramiento del establecimiento comercial, hasta la suspensión o clausura definitiva”, subrayó.
El procurador capitalino subrayó finalmente, que cualquier estrategia de combate al consumo de alcohol fracasará si los padres de familia no ponen de su parte, pues son ellos los que dan a los menores los recursos económicos y el espacio para colocarse en situaciones de riesgo.
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